Una encuesta con más de 4.200 participantes ofrece una perspectiva sobre el consumidor típico de servicios de salud en Latinoamérica, incluida su tendencia a diferir tratamientos y el deseo de recibir atención en lugares más convenientes.
En buena parte del mundo, la atención de la salud está virando hacia un modelo centrado en el paciente similar al de otras industrias1. Este giro implica la priorización de la experiencia del paciente y un uso más intensivo de propuestas e interacciones digitales, entre otros cambios. El objetivo de ello es ofrecer una atención de mejor calidad, volverla más asequible y expandir el acceso.Share
Sobre los autores
Históricamente, los servicios de salud en Latinoamérica se han caracterizado por dificultades en el acceso y altos costos relativos. En promedio, en Latinoamérica y el Caribe, los consumidores afrontan el 24 por ciento de los costos totales de la salud, en comparación con el 14 por ciento en la Unión Europea y el 10 por ciento en Estados Unidos2. Por ello, pasar a modelos más centrados en el paciente podría tener efectos considerables. Pero para lograrlo es necesario entender cómo piensan los latinoamericanos acerca de los servicios de salud que reciben y qué cambios les gustaría ver.Share
Acerca de la encuesta
McKinsey encuestó a más de 4.200 personas en América Latina para conocer sus perspectivas. Los resultados nos permitieron conocer más sobre los comportamientos y las experiencias de los usuarios de servicios de salud, incluida la manera en que abordan la prevención y el bienestar, cómo financian el gasto en salud, dónde se atienden y qué productos – como planes de seguro o apps móviles – podrían satisfacer sus necesidades (ver Recuadro, “Acerca de la encuesta”). Las principales conclusiones son las siguientes:
- El 62 por ciento de los participantes manifestaron haber diferido algún tratamiento de salud, particularmente debido a problemas de accesibilidad y costo.
- Los canales digitales han ganado relevancia como fuente confiable de información sobre prevención y cuidado de la salud, con un 26 por ciento de los participantes utilizándolos como primera opción.
- Por otra parte, las preferencias se inclinan hacia lugares de atención más convenientes; el 34 por ciento de los encuestados expresaron su preferencia por la atención virtual o en el hogar para casos de baja complejidad.
- El 81 por ciento de los entrevistados mostraron interés por las apps de salud enfocadas en el bienestar y el cuidado preventivo – y muchos de ellos están dispuestos a pagar por ellas.
- El 20 por ciento de los consumidores encuestados desearían contratar un seguro de salud privado, pero carecen de los recursos económicos para hacerlo.
Analizamos estas y otras conclusiones en más detalle, y aportamos ideas dirigidas a todos los actores del sistema de salud con miras a replantear la manera de satisfacer las nuevas necesidades de sus consumidores latinoamericanos.
FUENTE: https://www.mckinsey.com